Como seguramente saben, queridos lectores, la respuesta corta es sí. La mayoría de nosotros ahorramos entre un 50 % y un 70 % en nuestras facturas de energía desde que nos pasamos a la electricidad. Sin embargo, hay una respuesta más larga: el costo de la carga depende de muchos factores, y recargar en la carretera es muy diferente a cargar en casa por la noche.
Comprar e instalar un cargador doméstico tiene sus costos. Los propietarios de vehículos eléctricos pueden esperar pagar alrededor de $500 por un buen cargador homologado por UL o ETL.
Estación de carga y otros miles de dólares para un electricista. En algunas zonas, los incentivos locales pueden aliviar el problema; por ejemplo, los clientes de servicios públicos de Los Ángeles podrían tener derecho a un reembolso de $500.
Así que cargar en casa es cómodo y barato, y a los osos polares y a los nietos les encanta. Sin embargo, al salir a la carretera, la cosa cambia. Los cargadores rápidos en carretera son cada vez más numerosos y prácticos, pero probablemente nunca serán baratos. El Wall Street Journal calculó el coste de un viaje por carretera de 480 kilómetros y descubrió que un conductor de vehículo eléctrico suele pagar tanto o más que un coche de gasolina.
En Los Ángeles, donde la gasolina tiene uno de los precios más altos del país, el hipotético conductor de un Mach-E ahorraría una pequeña cantidad en un viaje de 480 kilómetros. En otros lugares, los conductores de vehículos eléctricos gastarían entre 4 y 12 dólares más para recorrer 480 kilómetros en un vehículo eléctrico. En un viaje de 480 kilómetros de San Luis a Chicago, el propietario de un Mach-E podría pagar 12,25 dólares más que el propietario de un RAV4 en energía. Sin embargo, quienes viajan con vehículos eléctricos con experiencia suelen sumar kilómetros gratis en hoteles, restaurantes y otras paradas, por lo que ese sobrecosto de 12 dólares por conducir un vehículo eléctrico debería considerarse el peor escenario posible.
A los estadounidenses les encanta el encanto de la carretera, pero como señala el WSJ, la mayoría no viajamos por carretera con tanta frecuencia. Según un estudio del Departamento de Transporte (DOT), menos del 0,5% de los viajes en EE. UU. son de más de 240 kilómetros, por lo que, para la mayoría de los conductores, el coste de cargar un vehículo en un viaje por carretera no debería ser un factor importante en su decisión de compra.
Un estudio de Consumer Reports de 2020 reveló que los conductores de vehículos eléctricos pueden esperar ahorros sustanciales tanto en mantenimiento como en combustible. Se descubrió que el mantenimiento de los vehículos eléctricos cuesta la mitad, y que el ahorro al cargarlos en casa compensa con creces cualquier gasto de carga en un viaje ocasional por carretera.
Hora de publicación: 15 de enero de 2022